La economía del bien común

La economía del bien común escrito por Jean Tirole, recibió un Premio Nobel en 2014, la academia sueca se refirió a él como: "uno de los economistas más influyentes de nuestro tiempo".

El libro trata de una crítica por precisa de los valores humanistas, un mundo sin piedad ni compasión, desintegración del vínculo social, repliegues de los político y del servicio público y falta de sostenibilidad del medio ambiente.

Tiene como objetivo principal crear un mundo mejor, para eso es necesario abandonar los intereses individuales de cada uno y alcanzar un interés colectivo, favoreciendo así la satisfacción y el bienestar general. Pero el autor nos muestra a lo largo de la obra como esta en desacuerdo con el gobierno capitalista actual, egoísta y egocéntrico, además de con el estado actual, ya que ambos, no colaboran con su objetivo que considera esencial, alcanzar el bien común. Planteando así una sociedad egoísta, que nos aleja de nuestra instituciones tradicionales y que necesita de incentivos para realizar comportamientos sociales responsables, ya que por ella sola no puede. Una sociedad que no se pone en el lugar del otro, así también Tirole aborda el concepto de solidaridad, la cual dice que alcanzaremos cuando dejemos los prejuicios y segnos cognitivos a un lago y dejemos de guiarnos por ellos exclusivamente. Este problema también lo podemos ver reflejado en Europa, donde somos muy pocos solidarios con nuestros países vecinos, cuando grande diferencias entre nosotros debido a la gran competitividad fomentada entre ellos, nada beneficioso para nosotros, ya que los países con mayor riqueza no quieren ayudar a los mas pobres para no decaer estos en la misma situación, por eso Tirole plantea la Unión Bancaria como solución al problema.

Por otra parte, otro tema bastante tratado por el autor es, los avances tecnológicos y como nos afectan a nuestra sociedad. Critica a la digitalización , la cual afirma que tiene muchas ventajas, proporcionándonos avances y adelantos en el ámbito de la economía de bienes y servicios, a la vez que proporciona gran imparcialidad y confianza cuando compra bienes y prueba servicios, pero, en cuanto a sus inconvenientes, destaca la interoperabilidad entre plataformas, es decir, que no todas las plataformas son siempre compatibles, destacando el caso de las tarjetas bancarias, visa, Mastercard etc

Por otro lado también crítica, la economía digital, que hoy en día esta muy presente; cada vez que queremos entrar en una pagina web necesitamos aprobar una serie de condiciones, que realmente no sabemos al cien por cien de que se tratan, este es uno de los problemas que plantea la economía digital, que no ofrece la protección al cliente necesaria, ni a su privacidad, o en nuestro día a día, cuando se produce la entrada de una innovación en el mercado afectando a los ya instalados en el mimos con anterioridad, nos lo hace ver con el ejemplo de Uber, en el sector de transporte público, una innovación rompedora que revolucionó este sector, abandonando el transporte habitual como podía ser el taxi ( que era algo más caro), el autobús, metro etc, por eso Tirole apuesta por la cualificación y formación de las personas, para que están sean mas eficientes en sus trabajos y no acaben siendo sustituidos por ordenadores, los que significaría aumentar aún más la tasa de desempleo. Este aspecto también es criticado por Tirole, ya que dice que quien regula los desempleos; es decir, los jueces, carecen de información suficiente para poder hacerlo correctamente. Tirole propone una regulación financiera, con la información suficiente para no recaer en una situación similar a la terrible crisis de 2008.

Finalmente también este problema se extiende al ámbito medioambiental, con el cambio climático, que es un problema real, promovido por una sociedad egoísta, en la que priman los valores individuales, antes que las consecuencias medioambientales y como nos afecten en un futuro, donde la sociedad, ambiciosa, promueve un constante inmovilismo, no saliendo nunca de esta situación, ya que los egoísmos nacionales priman sobre el imperativo ecológico. El cambio climático es un problema del bien común; de todos, por eso Tirole realiza esta obra para concienciarnos del importante papel que tenemos cada uno de nosotros, antes las diferentes situaciones para crear un mundo mejor, lo explica mediante el velo de la ignorancia, porque "El uso privado está bien, pero no el abusar de él a expensas de los demás"